ANUNCIO acerca de COOKIES

AVISO SOBRE "COOKIES": Al igual que la mayoría de los sitios en Internet, este sitio emplea "cookies" (galletas informáticas) provistas por Google y otros para prestar sus servicios, personalizar anuncios y analizar el tráfico. Google y otros reciben información sobre tu uso de este sitio web. Si utilizas este sitio, se sobreentiende que aceptas el uso de estas "cookies".

jueves, 15 de agosto de 2013

ARCA DE NOÉ

El arca de Noé fue la provisión que permitió a los antepasados de toda la humanidad sobrevivir al diluvio global en 2370-2369 a. E.C. Jehová le dio a Noé instrucciones detalladas en cuanto a su tamaño, forma, sistema de iluminación y ventilación, así como sobre los materiales que se deberían usar para su construcción. (Gé 6:14-16.)

Diseño y tamaño:
El arca (heb. te·váh; gr. ki·bō·tós) era rectangular, parecida a un cofre, con las esquinas cuadradas y el fondo plano. No necesitaba un fondo redondeado ni una proa en punta para cortar las aguas con rapidez, tampoco un mecanismo para dirigirla; tan solo era preciso que fuese hermética y flotase. Una embarcación de esta forma resulta muy estable, y no es fácil hacerla zozobrar; además, tiene alrededor de una tercera parte más de espacio para almacenamiento que los barcos de diseño convencional. Había una puerta en uno de los lados del arca para embarcar y desembarcar la carga.

El tamaño del arca era de 300 codos de largo, 50 de ancho y 30 de alto. Haciendo un cálculo moderado de la longitud del codo, unos 44,5 cm. —algunos piensan que el antiguo codo se aproximaba a los 56 ó 61 cm.—, el arca mediría unos 134 m., por 22,5 m. y por 13,5 m., menos de la mitad del largo del transatlántico Queen Elizabeth 2. La proporción entre la longitud y la anchura (6 a 1) es la que se usa en la arquitectura naval moderna. Esto significa que el volumen bruto del arca sería de unos 40.000 m.3. Se calcula que una embarcación semejante tendría un desplazamiento casi igual al del enorme Titanic de este siglo XX, de 269 m. de largo. Ninguna embarcación de tiempos antiguos se aproximó siquiera ligeramente al tamaño colosal de esta arca. Se reforzó su interior añadiéndole dos pisos, con lo que las tres cubiertas sumaban un total de más de 8.900 m.2 de superficie hábil.

Jehová le dijo a Noé: “Harás un tsóhar [techo; o ventana] para el arca”. (Gé 6:16.) No está del todo claro qué era este tsó·har o cómo se construyó. Hay eruditos que opinan que el término está relacionado con luz, así que lo traducen por “ventana” (Val, VP), “tragaluz” (NC), “lucera” (CI). No obstante, otros relacionan el término tsó·har con una raíz arábiga posterior cuyo significado es “dorso (de la mano)”, “dorsal (de un animal)”, “cubierta (de un barco)”, es decir, en un sentido amplio, aquella parte opuesta al suelo o que no toca la superficie del agua, de ahí que opten por traducirlo “techo” (RH) o “cubierta” (BJ). A Noé se le dijo que el tsó·har habría de completarse “hasta el punto de un codo hacia arriba”. (Gé 6:16.)

Por consiguiente, si el tsó·har había de suministrar iluminación y ventilación adecuadas, no sería simplemente una claraboya de un codo cuadrado, sino un vano de un codo de alto que estaría próximo al techo y rodearía el arca por sus cuatro lados, de manera que proporcionaría una abertura de unos 140 m.2 de extensión en total. Por otra parte, aun si se dejó inmediatamente debajo del techo, o en cualquier otra parte, una abertura generosa que facilitara la ventilación, el techo pudo haber tenido una ligera inclinación. Respecto a esta posibilidad, James F. Armstrong hizo el siguiente comentario en la obra Vetus Testamentum (Leiden, 1960, pág. 333): “‘La acabarás a un codo de elevación por la parte de arriba’; esta es una expresión difícil de entender si se traduce tsó·har por ‘luz (equivalente a ventana)’ o por ‘techo (plano)’. No obstante, en caso de que se tratase de un tejado de dos aguas, el ‘codo de elevación’ podría referirse a la alzada de la cresta del tejado con relación a las paredes. En la jerga arquitectónica, este ‘codo de elevación’ se referiría a la altura de los montantes maestros sobre los que se colocaría el caballete para el tejado [...]. Según este razonamiento, el tejado del arca de Noé debió tener una pendiente de un 4% (1 codo de elevación y 25 codos de pendiente a ambos lados, desde el caballete hasta las paredes), una pendiente sumamente adecuada para que el agua se deslizase”.

Jehová especificó con qué material se debería construir esta inmensa arca: “Haz para ti un arca de madera de árbol resinoso [literalmente, “árboles de gófer”]”. (Gé 6:14.) Algunos opinan que esta madera resinosa se obtuvo del ciprés o de algún árbol parecido. El ciprés crecía en abundancia en aquella parte del mundo, y tanto los fenicios como Alejandro Magno preferían su madera, en especial para la construcción de barcos —como también ocurre hoy día—, pues es particularmente resistente al agua y a la putrefacción. Se sabe que algunas puertas y postes hechos de ciprés han durado mil cien años. Por otra parte, a Noé no se le dijo tan solo que calafateara las juntas, sino que ‘cubriera el arca por dentro y por fuera con alquitrán’.


=
La Biblia.

Sitio oficial gratuito de los Testigos de Jehová

ARCA
http://wol.jw.org/es/wol/d/r4/lp-s/1200000367

¿ES LA BIBLIA UN LIBRO ESCRITO POR HOMBRES SABIOS, O VIENE DE DIOS?
http://www.jw.org/es/ense%C3%B1anzas-b%C3%ADblicas/preguntas/biblia-hombres-sabios/

LA DESTRUCCIÓN DE UN MUNDO ANTIGUO (g2002)
http://wol.jw.org/es/wol/d/r4/lp-s/2002160

Diccionario Bíblico: Perspicacia, Pag. 327-328.
http://wol.jw.org/es/wol/d/r4/lp-s/1200000758

JESUS DIJO QUE EL DILUVIO FUE UNA REALIDAD.
http://wol.jw.org/es/wol/d/r4/lp-s/2008400




LIBRO :DILUVIO BIBLICO Y LA ERA DEL HIELO
http://www.scribd.com/doc/23412288/The-Biblical-Flood-and-the-Ice-Epoch
-
Los hijos de Noé seguramente le ayudaron a talar los árboles, también a construir y calafatear el arca, parecido a lo que hizo este holandés en 2007
http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/misc/newsid_6606000/6606243.stm
---

Desde el siglo XIX se han hecho muchos esfuerzos por hallar el arca en las montañas de Ararat. Estas montañas tienen dos picos prominentes: uno, de 5.165 metros (16.950 pies) de altura; el otro, de 3.914 metros (12.840 pies). El más alto de los dos está cubierto de nieves perpetuas. Debido a los cambios climáticos postdiluvianos, el arca pronto habría quedado sepultada por la nieve. Algunos investigadores creen firmemente que el arca todavía está allí, sepultada profundamente en un glaciar. Afirman que en algunas ocasiones el hielo se ha derretido lo suficiente como para que parte del arca haya quedado expuesta temporalmente.

En el libro In Search of Noah’s Ark (En busca del arca de Noé) se cita a George Hagopian, armenio que alega que escaló el monte Ararat y vio el arca en 1902 y de nuevo en 1904. Él dijo que, en la primera visita, de hecho subió a encima del arca.

 “Me levanté y vi por todas partes la embarcación. Era larga. Tenía una altura como de cuarenta pies [12 metros].” En cuanto a lo que observó en su visita posterior, dijo: “No vi verdaderas curvas. Difería de todo otro barco que había visto. Más parecía una barcaza de fondo plano”.

Desde 1952 hasta 1969, en cuatro ocasiones Fernand Navarra trató de hallar pruebas del arca. En su tercer viaje al monte Ararat descendió al fondo de una grieta en un glaciar, donde- SEGÚN ÉL-  halló un pedazo de madera oscura metido en el hielo. “Tiene que haber sido muy largo —dijo—, y quizás todavía estaba unido a otras partes de la armazón de la embarcación. Solo pude cortar en la dirección de la fibra hasta que separé un pedazo como de cinco pies [1,5 metros] de largo.”

(Sin embargo, una de los que oficiaron de guías, dijo que el trozo de madera fue comprado por Navarra en una villa cercana.Además pruebas de radiocarbono 14 indicaron que el trozo de madera no era de esa época)  VER https://ncse.ngo/files/pub/CEJ/pdfs/CEJ_06.pdf#page=8


El profesor Richard Bliss, uno de varios peritos que examinaron la madera, dijo: “La muestra de madera de Navarra es una viga estructural y está impregnada de brea bituminosa. Tiene empalmes de muescas y espigas. Y sin duda fue tallada a mano y escuadrada”. Se fijó para la madera la edad aproximada de unos cuatro o cinco mil años.

Aunque se han hecho esfuerzos por hallar el arca en el monte Ararat, la prueba categórica de que se empleó para sobrevivir a una inundación desastrosa está en el registro escrito de ese acontecimiento en el libro bíblico de Génesis. Se puede ver confirmación de ese registro en la gran cantidad de leyendas diluvianas que hay entre pueblos primitivos de todo el mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario