De vez en cuando aparecen falsos informes en la prensa. Tratan de hacer creer que una transfusion de sangre pudiera haber prolongado considerablemente la vida del paciente.
Muchos de esos casos se refieren a pacientes terminales, desahuciados.
Por ejemplo, desde Chile, el caso de Mónica, Edith Morales de Cantero.
Ella tuvo un cáncer óseo que la fue deteriorando rápidamente.
La operaron de la vesícula con riesgo vital, pero gracias a Dios y a la pericia del médico, pudo salir bien de su operación, por supuesto, sin necesidad de transfusiones de sangre.
Monica, en pleno uso de sus facultades mentales, aceptó todo tipo de tratamientos sin sangre.
El periódico informa que ella estaba "aquejada de un mieloma múltiple con infiltración medular, leucemia, o cáncer a la sangre, de carácter terminal,"
¿Y qué es un paciente terminal? Un diccionario nos explica:
"El paciente o enfermo terminal es un término médico que indica que una enfermedad no puede ser curada o tratada de manera adecuada, y se espera como resultado la muerte del paciente, dentro de un período corto de tiempo."
Extender la vida de Edith no dependia de transfusiones y ella decidió sobre su tratamiento. El usar sangre, en vez de mejorar su calidad de vida, solo habria extendido su agonía.
Su esposo desde hace mucho tiempo no estuvo de acuerdo con los tratamientos envueltos. Su presentación ante la televisión no refleja la verdad de la situación
Una amiga de la misma ciudad, Rancagua, me comentó que la justicia quito la tenencia de los hijos del padre.
Los hijos se hallarían a cargo de la tía, o sea la hermana de la difunta madre.
La presentación de TV es muy tendenciosa. Se nota que el anunciador interrumpe permanentemente a su invitado y casi no le deja terminar ninguna frase.
Un cristiano verdadero, maduro no se ríe del dolor ajeno. No lo hacen tampoco allí.
Fuentes:
El Mercurio, Lunes 21 de Julio 2008
http://diario.elmercurio.com/detalle/index.asp?id={cfd95ec1-362b-40bf-94ba-94c746512773}
Consultado 18 Feb. 2015
http://es.answers.yahoo.com/question/index?qid=20090131225851AAWxOlG
Muchos de esos casos se refieren a pacientes terminales, desahuciados.
Por ejemplo, desde Chile, el caso de Mónica, Edith Morales de Cantero.
Ella tuvo un cáncer óseo que la fue deteriorando rápidamente.
La operaron de la vesícula con riesgo vital, pero gracias a Dios y a la pericia del médico, pudo salir bien de su operación, por supuesto, sin necesidad de transfusiones de sangre.
Monica, en pleno uso de sus facultades mentales, aceptó todo tipo de tratamientos sin sangre.
El periódico informa que ella estaba "aquejada de un mieloma múltiple con infiltración medular, leucemia, o cáncer a la sangre, de carácter terminal,"
¿Y qué es un paciente terminal? Un diccionario nos explica:
"El paciente o enfermo terminal es un término médico que indica que una enfermedad no puede ser curada o tratada de manera adecuada, y se espera como resultado la muerte del paciente, dentro de un período corto de tiempo."
Extender la vida de Edith no dependia de transfusiones y ella decidió sobre su tratamiento. El usar sangre, en vez de mejorar su calidad de vida, solo habria extendido su agonía.
Su esposo desde hace mucho tiempo no estuvo de acuerdo con los tratamientos envueltos. Su presentación ante la televisión no refleja la verdad de la situación
Una amiga de la misma ciudad, Rancagua, me comentó que la justicia quito la tenencia de los hijos del padre.
Los hijos se hallarían a cargo de la tía, o sea la hermana de la difunta madre.
La presentación de TV es muy tendenciosa. Se nota que el anunciador interrumpe permanentemente a su invitado y casi no le deja terminar ninguna frase.
Un cristiano verdadero, maduro no se ríe del dolor ajeno. No lo hacen tampoco allí.
Fuentes:
El Mercurio, Lunes 21 de Julio 2008
http://diario.elmercurio.com/detalle/index.asp?id={cfd95ec1-362b-40bf-94ba-94c746512773}
Consultado 18 Feb. 2015
http://es.answers.yahoo.com/question/index?qid=20090131225851AAWxOlG
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